ATEME transforma la entrega de vídeo. Con sede en Francia y presencia internacional, la empresa está especializada en soluciones de compresión de vídeo que dan al contenido de los programas el formato adecuado para broadcasters, empresas de televisión por cable y distribuidores de Internet y de televisión por satélite, de modo que se pueda utilizar independientemente del modelo de negocio.
La innovación es el orgullo de ATEME. Uno de sus productos de software insignia, TITAN Live, funciona independientemente del hardware que se esté utilizando, siendo capaz de transcodificar vídeo utilizando tanto servidores genéricos como cualquier infraestructura en la nube.
Ahora, la solución es compatible con el formato de codificación de audio Dolby AC-4. Hablamos con Thomas Burnichon, director de tecnología de ATEME, sobre esta adición y sobre el futuro de su empresa y del sector.
¿Cómo describiría ATEME?
ATEME nació hace unos 30 años y cuenta con más de 300 empleados, más de la mitad de los cuales se dedican a I+D. Crecemos de forma rápida y rentable (a un ritmo medio de más del 20 % anual) y estamos conquistando el mercado gracias a la innovación tecnológica y a nuestros novedosos modelos de interacción con el cliente. Trabajamos con empresas que se dedican a entregar contenido de vídeo, mediante canales tanto tradicionales como modernos, y aplicamos la innovación y la agilidad para que la entrega resulte asequible a cualquier escala.
Cuéntenos un poco acerca de TITAN Live.
Nuestra plataforma TITAN transcodifica el material de programas en formatos de distribución y permite a los colaboradores cumplir los requisitos de entrega.
Lo interesante de TITAN Live es que se puede utilizar en local en su propio hardware, pero también en la nube, ya que es una solución 100 % software: la combinación ideal para mantener a raya los gastos en capital y para aquellos usuarios que necesitan flexibilidad y densidad. Gracias a ella, el sector ya puede aprovechar todas las ventajas de la nube, y ahora, con Dolby AC-4, cuenta con todo lo necesario para el empaquetado y la distribución de contenido en streaming de última generación.
¿Qué les ha llevado a incluir Dolby AC-4 precisamente ahora?
La demanda de los clientes y nuestra predicción de la evolución del mercado. En principio, Dolby AC-4 resulta interesante para la distribución, de ahí que lo hayamos añadido a TITAN Live. Gran parte de la programación no cuenta aún con Dolby AC-4. Por ejemplo, la publicidad todavía no es inmersiva, pero, para poder adaptarse a la evolución de los modelos de contenido, todo el flujo de trabajo ha de ser compatible con esta opción.
Además, Dolby AC-4 presenta ventajas inmediatas como un gran rendimiento a tasas de bits más bajas o menores costes de entrega. Pronto veremos aparecer nuevos casos de uso, como por ejemplo que el usuario pueda dar protagonismo a los diálogos sobre la música de fondo. Nosotros ya estamos preparados. Y nuestros clientes también lo estarán. Este año veremos una proliferación del formato Dolby AC-4 en Europa.
¿Cuánto tiempo les llevó añadir Dolby AC-4 a TITAN Live, y cuál fue su experiencia trabajando con Dolby?
Fue rápido. Lo hicimos en dos pasos: una puesta a punto inicial, y el desarrollo de la versión final como producto. Mantuvimos una colaboración muy estrecha: Dolby tomó buena nota de nuestros comentarios y nosotros seguimos sus consejos. Todos estos intercambios dieron como resultado una relación simbiótica. Nos llevó dos o tres meses conseguir que el sistema funcionase.
Después, probamos distintas aplicaciones teniendo en cuenta los comentarios que nos hicieron llegar los primeros clientes. Esto nos llevó entre seis y doce meses. Nos resultó muy cómodo trabajar con el personal de validación de Dolby. Pudimos someter distintos elementos a distintas pruebas, en lugar de tener que condensarlo todo en una megaprueba única, lo que nos ahorró mucho papeleo y la necesidad de realizar un montón de cambios a posteriori. Un proceso en perfecta armonía con nuestra metodología ágil.
¿Cómo desarrollarán sus productos en adelante?
Nos basamos en distintas fuentes de información, como la que nos proporcionan nuestros clientes, pero también intentamos predecir las necesidades futuras. Nuestros clientes pueden estar seguros de que tenemos la capacidad de adaptarnos rápidamente a los cambios.
Debido a nuestro tamaño, nosotros no podemos anticiparnos a todo, pero Dolby trabaja con mucha anticipación y sabe mirar al futuro y predecir la evolución del mercado, invirtiendo en tendencias que se mantienen en el tiempo. Y nosotros les dejamos que lo hagan. Como en toda buena colaboración, nos complementamos.
Cuando hace falta, sacamos al mercado productos y servicios en muy poco tiempo, así que nos aseguramos de estar estrechamente alineados técnica y comercialmente Dolby. En ATEME, ayudamos a Dolby a crear las soluciones que necesitan usuarios como nosotros, y Dolby desarrolla la tecnología esencial que impulsa la estrategia a largo plazo del mercado.